Los Ángeles 2010: Nissan Quest MkIV

Nissan Quest MkIV

El paso de los años es para muchos modelos imperdonable. En el caso del Nissan Quest de tercera generación esto era particularmente cierto, puesto que lleva en el mercado desde 2004, y ni siquiera entonces parecía un coche moderno. Ahora, la japonesa presenta la cuarta entrega en el Salón del Automóvil de Los Ángeles, con un aspecto mucho más trabajado.

Compartiendo plataforma con el Nissan Elgrand comercializado en Japón, el nuevo Quest 2011 pretende robar clientes a los exitosos Honda Odyssey y Toyota Sienna, además de los Chrysler Town&Country/Dodge Caravan. Para ello se ha tratado de ganar espacio para los pasajeros, mejorar la versatilidad y aumentar la calidad percibida. Y esto último se ha conseguido con creces, siendo uno de los vehículos de la marca con mejor impresión visual. Plásticos blandos, excelente combinación de colores y muchos guarnecidos en piel lo convierten en un auténtico salón rodante para siete personas.

El Nissan Quest 2011 se mueve gracias al motor 3.5i V6 24 válvulas de 253 caballos. Por supuesto se combina con un cambio automático de tipo CVT que la marca denomina XTronic. Posiblemente no sea un automóvil muy rápido, pero tampoco lo necesita el cliente al que va dirigido, que buscará más el confort y silencio de marcha que reducir algunas décimas frente al crono.

En materia de equipamiento, la gama presenta importantes novedades. Así entre los nuevos elementos disponibles encontramos el sensor de presión de los neumáticos, pantalla táctil de ocho pulgadas con diferentes funciones, climatización automática independiente, sistema de aviso de ángulo muerto en retrovisores, dirección asistida variable en función de la velocidad, arranque por botón, etc. Por supuesto en seguridad no faltan el ESP, TCS, ABS y ópticas HID direccionales, aunque en algunos casos dependerá del nivel de terminación elegido.

Su lanzamiento en Estados Unidos debería no demorarse mucho, ahora que la generación actual apenas tiene demanda. Lo que está claro es que no lo veremos en Europa, algo lógico incluso aunque tuviera un motor diésel adaptado, ya que este segmento no pasa por su mejor momento.